Hermanas
24.08.2020
Hermanas
Durante años el agua y la pintura conformaban una hermandad irrevocable. Sentían entre ambas un amor único. Estaban tan unidas que compartían la necesidad de crear, fluir; la gracia al deslizarse sobre el lienzo, las ganas de llenarlo todo de color.
Un día, cuando la acuarela fue completada, el agua entendió que debía marcharse. Tranquila -le dijo a la pintura- el caño volverá a correr y juntas compondremos un millón de nuevas vidas.
Microrrelato dedicado a mi hermana favorita, la única que tengo. Te quiero.
Miguel Paneque Folch